Elcira goza del privilegio de tener entre su equipo a cuatro personas, profesionales todas, con un título académico que las acredita como estudiosas de la ingeniería. Son jóvenes: Sara y Silvia. Marcos y Omar, también lo son.
Excepto Silvia, graduada de la universidad que tiene el sustantivo del físico alemán más universal, el resto son profesionales a los que la casa jesuita de estudios superiores les dio su bendición.
No es común que las instituciones tengan dentro de su estructura organizativa a un buen equipo de trabajo, y si este grupo sobrepasa las expectativas de calidad humana, eso ya es ganancia.
Son el equipo y el buen tino de la dirección los que hacen crecer a la institución y no a la inversa. Elcira, en gran medida ha sabido procesar de entre la nata, la crema del mejor capital humano, y con esto que FUNDES crezca y se pasee por El Salvador como lo que es, un gigante.
Excepto Silvia, graduada de la universidad que tiene el sustantivo del físico alemán más universal, el resto son profesionales a los que la casa jesuita de estudios superiores les dio su bendición.
No es común que las instituciones tengan dentro de su estructura organizativa a un buen equipo de trabajo, y si este grupo sobrepasa las expectativas de calidad humana, eso ya es ganancia.
Son el equipo y el buen tino de la dirección los que hacen crecer a la institución y no a la inversa. Elcira, en gran medida ha sabido procesar de entre la nata, la crema del mejor capital humano, y con esto que FUNDES crezca y se pasee por El Salvador como lo que es, un gigante.
Para Elcira
22/02/2008
22/02/2008
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