lunes, 19 de abril de 2010

Un Roque para la lectura*

Fiat.
Fotografía: Gustavo A. Rodríguez Nava

Nace Roque Dalton en San Salvador, el 14 de mayo de 1935, siendo su madre la enfermera María García Medrano y su padre, el estadounidense Winall Dalton.
Sus primeros pasos educativos los da en el Colegio Santa Teresita del Niño Jesús y en el Colegio Bautista. Es en 1946 que forma parte de la familia del Colegio Externado de San José, y se graduó de bachiller con honores en 1952, situación que le permitió ganarse una beca para estudiar en Chile.
En 1953 parte para Suramérica a estudiar Derecho en la Universidad Católica de Chile. Su estadía en Chile es corta, y en 1954 retorna al país e ingresa a la Universidad de El Salvador.
A principios de mayo, en una reunión que tuvo lugar en la Facultad de Jurisprudencia y Ciencias Sociales, que se ubicaba en el lado poniente de Catedral Metropolitana, asistió Roque. Jorge Arias Gómez, uno de los convocantes lo recuerda así: “Pues bien, aquel muchacho delgado, de estatura salvadoreño promedio (1.67 mts.), con saco de fina pana color camello, pantalón café y corbata hacían juego armonioso en el conjunto, al dar su nombre, con voz suave, dijo: Soy Roque Dalton, estudio derecho y he cursado igual carrera en la Universidad de Chile1.
De esa primera reunión nació “Acción Estudiantil Universitaria” (AEU), y prontamente la UAE obtuvo éxitos en las elecciones del Alma Máter, recuperando el terreno perdido. Roque fue conocido por ser el portador de la declaración de principios y programas de la UAE. Integra la plana de redacción del semanario Opinión Estudiantil, cuya fundación data desde 1918.
Es el 25 de febrero de 1955 que contrae nupcias con Aída Cañas, y producto de este matrimonio, nacen Roque Antonio, Juan José y Jorge Vladimir.
“Visita después Checoslovaquia y algunos países de Europa occidental: España, Portugal, Italia y Austria, antes del regreso a América. Refiere Arias Gómez que Roque ingresa al Partido Comunista Salvadoreño hacia 1958 ó 1959”2.
Integra el grupo literario de La Generación Comprometida y junto con el poeta guatemalteco Otto René Castillo, Manlio Argueta, Roberto Armijo y Alfonso Quijada Urías, fundan el “Circulo Literario Universitario” (CLU).
Antes de graduarse en 1961, el gobierno militar lo exilia. Parte hacia México, donde publica La ventana en el rostro, que contiene “las características de su quehacer poético: su lenguaje de ruptura, la voluntad conceptual, sus estructuras innovadoras”3.
La monografía El Salvador fue publicada en Cuba en el año de 1963, así como su ensayo sobre César Vallejo.
Regresa a El Salvador y en 1964 es capturado y encarcelado en el penal de Cojutepeque, del cual escapa, gracias a un fuerte temblor que colapsa las débiles paredes de su celda. Esto según sus palabras, que escribió en su novela Pobrecito Poeta que era yo. Hay otra versión y es que, según el poeta Javier Alas, en Roque Dalton: el turno del poeta: “…el poeta salvadoreño Pedro Geoffroy Rivas, muy influyente por entonces, habría mediado su liberación, custodiándolo hasta la frontera”.
Los testimonios, libro de poesía y una monografía sobre México, también datan de esta fecha.
El año de 1967 concluye la escritura de Los pequeños infiernos. Rompe con el Partido Comunista Salvadoreño y se organiza en el Ejército Revolucionario del Pueblo, ERP.
En 1969 gana el Premio Casa de las Américas con su poemario Taberna y otros lugares. Su trabajo fue escogido de “entre doscientos veintiún cuadernos”4 y el jurado “estuvo integrado por José Agustín Goytisolo, Antonio Cisneros, René Depestre, Efraín Huerta y Roberto Fernández Retamar”5.
Ese mismo año la Revista Casa de las Américas le publica Oda a Lenín, que más tarde formaría parte del corpus de Un libro rojo para Lenín. La Oda a Lenín es “escrita con ocasión del primer centenario de nacimiento del gran líder comunista”6.
En Costa Rica, en 1972, publica Miguel Mármol.
Fue en el año de 1973, cuando Roque retorna, de manera clandestina, a El Salvador.
El 10 de mayo de 1975, es para no olvidar. A Roque, sus mismos “compañeros”, le hacen un juicio sumario en el cual lo acusan de crear insubordinación dentro del grupo y de ser agente de la inteligencia de Estados Unidos. Esto último en razón de su fuga de la cárcel de Cojutepeque.
“La actitud de Roque en las partes que pude darme cuenta fue de estar constantemente señalando de que eso era un error, que debía ser investigado más. La actitud durante la ejecución fue de oponerse a ella en el sentido de señalar de que no, que eso iba a ser un gravísimo error, que era una injusticia”7.
El “tribunal de sentencia” lo constituyeron Alejandro Rivas Mira, Jorge Meléndez, Vladimir Rogel, Alberto Sandoval, Joaquín Villalobos y otro dirigente de seudónimo Mateo.
Roque Dalton fue ejecutado, junto a Pancho, el primer explosivista de las ERP y dejados en una zona del Playón, en Quezaltepeque, sin que a sus cuerpos se les diera digna sepultura ni de que sus responsables, hasta la fecha, hayan entregado el cadáver del poeta.

1. Jorge Arias Gómez, En memoria de Roque Dalton, Págs. 7 y 8, primera edición, julio de 1999, Editorial Memoria, San Salvador.
2. Javier Alas, Roque Dalton: el turno del poeta, pág. 18, primera edición, noviembre de 1999, Editorial Delgado, Antiguo Cuscatlán.
3. De la nota editorial de La ventana en el rostro, de Roque Dalton, pág. 7 y publicada por CONCULTURA en 1996.
4. y 5. Javier Alas, Roque Dalton: el turno del poeta, pág. 20,...
6. Jorge Arias Gómez, En memoria de Roque Dalton, pág. 18,...
7. Juan José Dalton, Muerte de Roque Dalton fue una injusticia. Entrevista a Joaquín Villalobos, tercera entrega, publicada en Diario Latino, pág. 20, el lunes 24 de mayo de 1993. La entrevista consta de cuatro partes, publicadas así: 20, 22, 24 y 25 de mayo de 1993.

* Escrito leído el día 19 de abril de 2010, en el Centro Escolar "Walter Thilo Deininger" de Antiguo Cuscatlán y durante la inauguración de la Semana de la Lectura.

1 comentario:

Unknown dijo...

Mi hermano, te felicito por haber aceptado dar esa charla en el Centro Escolar.Y espero que no se queden solo allí y al igual que te invitaron, lo hagan con otros personajes conocedores en la materia...un apretón de manos.